¿cuándo y dónde empezó la actividad humana a dejar su huella indeleble en la superficie de la Tierra? ¿Comenzó con la revolución industrial, con la extracción de combustibles fósiles, con las pruebas nucleares o con el desarrollo de la agricultura hace miles de años? Desde el 2009 un grupo de científicos (Grupo de Trabajo sobre el Antropoceno AWG) busca un marcador reconocible dentro del registro estratigráfico que sustente la definición formal del Antropoceno como una nueva época dentro de la Escala Geológica del Tiempo. En estratigrafía, ciencia que estudia e interpreta las rocas y unidades sedimentarias, un marcador estratigráfico consiste en un horizonte sedimentario de gran continuidad lateral que es claramente reconocible por sus características físicas o por su contenido fósil, siendo muy útil para correlacionar eventos o delimitar secuencias. Típicamente estos marcadores son el resultado de episodios instantáneos generalmente catastróficos y causantes de extinciones de vida, como por ejemplo erupciones volcánicas o avalanchas marinas.  Una sección condensada es,  por el contrario, un intervalo de sedimentitas marinas que se acumularon muy lentamente, representando un período de tiempo muy largo. Así, los fósiles y el material orgánico son allí muy abundantes y se concentran en horizontes delgados de color negro. Cuando estas secuencias son depositadas durante transgresiones marinas y están asociadas con superficies de máxima inundación, tambien pueden conformar importantes marcadores estratigráficos. 

En el 2015, el Instituto de Artes Visuales de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee organizó la exposición Placing the Golden Spike: Landscapes of the Anthropocene, la cual invita a contemplar cómo la manipulación de las ecologías locales y la explotación global de los recursos naturales requerirán nuevas formas de vivir en el siglo XXI y reúne a nueve artistas contemporáneos que a través de la fotografía, la escultura, la animación en vídeo, el cine, el performance y los eventos participativos exploran distintos lugares en los que podría considerarse la posibilidad de clavar el golden spike (en estratigrafía GSSP, siglas en ingles para Sección de Estratotipo y Punto de límite Global) en que marcaría el comienzo del Antropoceno, como por ejemplo los paisajes surrealistas de los campos petrolíferos, los vertederos de residuos nucleares, la atmósfera contaminada, el aumento del nivel del mar, los residuos plásticos e incluso el espacio digital.

Estraticromías  recurre a conceptos geológicos como el de los marcadores estratigráficos y asociaciones simbólicas como el registro físico con el existir, la sucesión de capas con el tiempo y el color con el arte, para retomar la discusión sobre el Antropoceno e imaginar a través del color y el material relictos escultóricos de la sociedad industrializada  ¿Podríamos marcar una época sin convertirnos en los causantes de un evento corto y catastrófico al destruir o impactar irreversiblemente el lugar que habitamos?